¿Cómo te entraron las ganas de cocinar?
¡Naturalmente, en mi infancia en Monistrol-sur-Loire, junto a mi madre, que era una excelente cocinera!
¿Cuál es tu experiencia?
Después de varios extras en el Auberge du Pont de Pont de Lignon, entré en la escuela de hostelería de Saint-Chamond. Con mi CAP en el bolsillo, pude trabajar en hermosas casas estrelladas (Loiseau, Pic) y, sobre todo, pasé 3 buenos años en Saint Bonnet-le-Froid junto a la
Chef Régis Marcon. 2002: la adquisición de Table du Barret en Beauzac y allí realicé mi sueño de la infancia, cocinar en mi restaurante. Desde 2002, la historia se ha escrito en
bransac.
¿Cómo definirías tu cocina?
Una cocina sincera y generosa, con el destaque de nuestros bellos productos locales y de temporada. El producto hace la receta. De nada sirve querer modificarlo, es autosuficiente cuando los productores hacen bien su trabajo. Siempre hago jugos, caldos, fumets con huesos, canales o huesos. ¡Qué bueno es un jugo de verdad!
¿Puedes hablarnos de tu producto?
"Pasión y compartir" que propones en
su casa de huéspedes?
Es una clase de cocina que hago en mi establecimiento los sábados por la tarde. Hacemos una comida completa para un máximo de 6 personas.
En un ambiente estudioso y sobre todo agradable con el mismo equipamiento que tienes en casa, les explico a mis aprendices cómo organizar una buena comida pudiendo disfrutar de los comensales alrededor de la mesa sin estar todo el día en la cocina. Por la noche, disfrutamos de la fórmula Table d'Hôte, los platos que hemos elaborado y los compartimos con los acompañantes que solo tienen que poner los pies debajo de la mesa.
¡Nada se tira, todo se transforma! Es mi lado de Auvergnat (risas)'.
¿Tus paseos favoritos?
Mis paseos me llevan a menudo con mi familia a las orillas del Loira; este Loira que veo todas las mañanas desde la casa. Con mis amigos, también aprecio mucho los pequeños viajes en kayak donde ofrezco picnics, viajes de pesca, especialmente truchas en nuestro encantador Ramel que fluye a través de las gargantas dominadas por la Chapelle du Fraisse, recolección de hongos … una de mis pasiones que Régis Marcon pudo para pasarme. ¡Estamos tan bien en nuestro Alto Loira! ¡Preservemos esta hermosa naturaleza para las generaciones venideras!
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